Las palabras homónimas son aquellas que presentan similitudes entre ellas. Algunas de estas pueden estar relacionadas con la ortografía y otras en la pronunciación. En el primer caso se les denomina homógrafas y en el segundo caso son homófonas. Estas son palabras que usualmente son confundidas entre ellas al momento de ser escritas, cada una de ellas tiene un significado distinto por lo cual se estaría incurriendo en un error ortográfico.
En el caso de las palabras mi y mí, ambas son acepciones que son igualmente válidas. Sin embargo, cada una de ellas presenta un significado distinto el cual es determinante al momento de ser utilizadas en un contexto determinado. Ninguna de ellas puede ser considerada como una forma correcta o incorrecta de escribir dicha palabra. A continuación se explica cómo se deben utilizar correctamente
¿Cuándo se usa mi y mí?
De acuerdo a lo indicado por la Real Academia Española (RAE), Ambas son palabras que están registradas de forma oficial y pueden ser utilizadas en el idioma español. En el caso de que esta palabra lleve una tilde se trata de un pronombre personal, En cambio sí se omite este signo ortográfico se estaría hablando de un adjetivo posesivo y sustantivo.
Este es un caso especial del uso del acento diacrítico. Este se utiliza en palabras que tienen una pronunciación similar. Haciendo entonces que se escriban de una forma distinta y cambiando su significado por completo. Entonces cada una de estas palabras podrá utilizarse de una forma adecuada al contexto en el que se desea emplear conociendo su definición.

La palabra “mi” sin la tilde es un pronombre personal que siempre estará acompañado de una preposición por delante de ella. En cambio, en su versión acentuada estará acompañada de un posesivo de forma obligatoria que estará ubicado a continuación de un sustantivo. A continuación se muestran algunos ejemplos
- ¿Acaso no confías en mí?
- Pues, a mí me gusta comer helados y chocolates
- El chófer venderá por mí y después de clase
Esta palabra con su acentuación es un pronombre personal que puede hacer referencia a la primera persona del singular que puede estar en femenino o en masculino. Se utiliza como complemento el cual está precedido por una preposición. La utilización del acento permite que pueda ejercer como adjetivo posesivo y también se distingue fácilmente de su versión sin la tilde.
En el caso de utilizar la palabra “mi” sin el uso de la acentuación, está puede ser utilizada de distintas maneras en una oración. En el primer caso, es un adjetivo posesivo, es apócope de la palabra “mío” el cual estará ante cediendo a un sustantivo. Por ello si se ubica antes del sustantivo podría estar indicando algún tipo de respeto o de cariño como se muestra en las siguientes oraciones:
- Mi mamá tiene hecha comida para cuando llegue de la escuela
- ¿Cuándo vamos a ir a cenar, mi amor?
- Mi Presidente, ya estamos listos para dar continuidad con la reunión.
- Mi vida eres lo mejor que me ha pasado
- Toda la armada y la marina está preparada para la acción, mi General
- Mi Profesora de matemáticas mi ha dicho que va a realizar un examen la próxima semana
También esta es una palabra que puede ser utilizada como un sustantivo masculino en referencia a la tercera nota de la escala musical. Un ejemplo de su utilización en una oración es la siguiente: el piano da un mi que esta desafinado. En el caso de ser un sustantivo femenino, entonces la palabra “mies” pasa a ser la duodécima letra del alfabeto griego